lunes, 27 de junio de 2011

Itsaslur (Pobeña-Kobaron)

En la parte más occidental de la costa vizcaína se encuentra el paseo de Itsaslur, que es en realidad una vía verde que discurre por el trazado de un antiguo ferrocarril minero, entre Pobeña y Kobaron. Se trata de un paseo acondicionado y llano, muy frecuentado por paseantes de todas las edades cuando llega el buen tiempo, y  que permite también sentir de cerca la fuerza de  las olas en días de mar brava.

El recorrido enlaza la playa de La Arena con las proximidades de la muga con Cantabria, circulando siempre por el mismo borde del mar, con fantásticas panorámicas sobre la bahía, Punta Lucero y los acantilados de la costa cántabra. En nuestros sentidos, el entorno marítimo se funde con los vestigios del pasado minero y los aires rurales que vienen del interior.

DISTANCIA: 5,4 kms
            DESNIVEL: 60 m. (0-60)
DIFICULTAD: Ninguna 1 (1-0-0)
            ITINERARIO: ida y vuelta  Inicio y final: Pobeña
            VIAS: Pista de cemento
ACCESOS: Bizkaibus A3335 Sestao-Muskiz (Desde Bilbao A3336 y A3337 hasta la playa de La Arena)
                 En coche por la autopista dirección Santander, salida Muskiz, y tomar desvío a la derecha hacia Pobeña
Más info:                                                                                                   http://www.viasverdes.com/ViasVerdes/Itinerarios/Pa%EDs%20Vasco/Vizcaya/V.V.%20Paseo%20de%20Itsaslur/Descripci%F3n
Guía Cartográfica de Bizkaia mapas 13-14



Pobeña es un pequeño y coqueto barrio de Muskiz, situado en el extremo occidental de la playa de La Arena, y acomodado sobre las pequeñas elevaciones circundantes. Se encuentra atravesado por el arroyo Arana, justo cuando confluye con el río Barbadun, para terminar por desaguar en el mismo arenal. Además de una hermosa iglesia y una muy animada plaza, cuenta con amplio aparcamiento, zona de juegos y una interesante marisma; asimismo, un curioso puente acerca el núcleo urbano a las mismas arenas de la playa.

VARIANTE: El recorrido puede iniciarse desde el lado contrario de la propia playa, ya en Zierbena, donde es más fácil llegar en transporte público. Tendríamos que bordearla o atravesarla por la arena, y por el citado puente acceder a Pobeña, añadiendo otros 900 metros al trayecto (ida)

Escaleras
Tenemos que atravesar el parking, donde veremos ya una señal indicadora de la ruta, hasta el fondo, donde se encuentra una residencia geriátrica y la ermita de Nuestra Señora del Socorro, y a la izquierda encontraremos la famosa subida de los 120 escalones, que nos conducirá al inicio del paseo.

La escalera discurre en el bonito entorno de un cerrado bosque, y una vez arriba circulamos por una brecha entre la roca, para salir, pocos metros después, de frente sobre la bahía. Desde esta atalaya divisamos Punta Lucero con su muelle y sus molinos, la gran playa con Oceja, Montaño y el Serantes a sus espaldas, y el interminable trayecto de las olas adentrandose hasta alcanzar la orilla.

Playa de La Arena
En pocos minutos, encontramos la única bifurcación del camino de hoy. Podemos continuar por el trazado lineal, admirando la mejor panorámica, o desviarnos por una pista de piedrilla que desciende hacia las viejas instalaciones mineras que culminaban en el cargadero McLennan. Esta construcción, en hierro y madera, sobresalía de la punta constituyendo una imagen clásica de la zona, pero fue destruida por un temporal en 2.008. Resulta sobrecogedor imaginar la violencia de las olas, capaz de aniquilar una construcción que había permanecido durante un siglo, situada además a una considerable altura. Podemos curiosear por la zona, contemplando los muros de piedra y diversos elementos que permitían la descarga del mineral hasta depositarlo en los barcos.  

El desaparecido cargadero de mineral

Volvemos a subir para retomar la pista y poco más adelante observamos a nuestra derecha la Punta de Castillo, un pequeño cabo en cuyo extremo se encuentran los restos de un antiguo puesto de vigilancia. Podemos abandonar de nuevo el camino para acercarnos a examinar la zona, transitando campo a través por una agradable y floreada campa. Desde este punto tenemos magníficas perspectivas sobre los rompientes que siguen hacia el Oeste, y un nuevo punto de vista hacia Punta Lucero y el parque eólico.  

Acantilados y Punta del Castillo
Regresamos al camino atravesando nuevamente el prado, y llegamos a la zona denominada El Aspra. Aquí la ruta discurre por el mismo borde del mar, y vemos algunos postes metálicos, semejantes a escaleras, utilizados para la recogida de algas. Hacia el mar cae un terraplén de considerable pendiente, donde habitualmente se ve algunos caballos pastando.

Vista hacia el oeste
En ocasiones, el camino se introduce por un tajo en el monte, viendonos vistosamente rodeados de roca, en algunos lugares protegida con mallas. También contemplamos varios paneles informativos sobre la acción del mar sobre los acantilados, o sobre la fauna en esta parte del litoral.

En el último tramo, el trayecto se dirige progresivamente hacia el interior, para poco después encontrarnos, casi de golpe, en el aparcamiento cercano a Kobaron. Junto a él hay unas buenas campas con bancos y barbacoas. Podemos dar por terminada aquí la excursión, aunque es recomendable atravesar el parking para internarnos en dirección oeste por un caminillo que desciende hacia un recodo con unas cuantas ruinas de instalaciones mineras. Si siguiésemos en esta dirección, llegaríamos por un tramo de tránsito algo complicado a la zona de Aguadulce, donde desemboca el arroyo de la Sequilla, en una vistosa cascadita. De vuelta ya al aparcamiento, veremos a la izquierda, muy próximo al mar, un extraño monolito recubierto de flores, probablemente en recuerdo de alguien fallecido.  

Instalaciones mineras en Kobaron

VARIANTE: Si no queremos volver por el mismo camino, siguiendo la carretera de acceso al parking durante unos 600 metros, llegamos al barrio de Kobaron. Aquí podemos tomar el Bizkaibus A3321 a Portugalete, o bien continuar la ruta a pie por el interior. El camino más fácil discurre por el alto, entre Itsaslur y la BI-3795, pasando junto a varios caseríos, aunque es poco transitado y en ocasiones puede ser costoso encontrar la ruta adecuada. También es posible tomar una desviación por la derecha en la zona del Aspra, que nos conduce por el interior hacia Campomar, donde se encuentra un antiguo lavadero de mineral y otras instalaciones. De aquí salimos de nuevo cerca de las escaleras del inicio del trayecto.

De vuelta al punto de partida, volviendo a admirar las extraordinarias imágenes del Cantábrico, podemos terminar la jornada tomando algo en algunos de los agradables establecimientos de Pobeña.

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